Desde el lunes antes del Miércoles de Ceniza hasta el Lunes Santo en algunas comunidades se celebra la Meditación de las Siete Palabras de Jesús en la Cruz, a veces conocida también simplemente como el Ejercicio de los Siete Lunes.
Se trata de un momento de oración y reflexión alrededor de las frases pronunciadas por Nuestro Señor durante su crucifixión, recogidas en los cuatro evangelios. Así, por ejemplo, en parroquias como la Basílica Nuestra Señora de los Ángeles, los fieles se reúnen cada lunes de Cuaresma para realizar esta práctica.
El Padre Victor Manuel Arrieta (q.d.D.g) fue quien creó la Meditación de las Siete Palabras de Jesús en la Cruz cerca de la década de 1940, cuando sirvió como párroco en San Pedro de Montes de Oca. Fue uno de los tantos legados que dejó ese destacado sacerdote.
Así, por ejemplo, el primer lunes se acostumbra iniciar con la frase: Padre, perdónales porque no saben lo que hacen. Por otro lado, el último lunes se termina con la frase: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu (Lc. 23, 46)
Cada lunes, normalmente se inicia con un canto, luego se hace una oración, se pronuncia un acto de contrición y se reflexiona sobre la frase dicha por Nuestro Señor.
El Padre Sebastián Abarca, vicario de la Basílica Nuestra Señora de los Ángeles, explicó que cuando empezó a desarrollarse la devoción por entonces no se celebraba la Santa Misa en las tardes, pues las personas hacían el ayuno y preferían ir en las primeras horas de la mañana al templo.
Entonces, por las tardes la comunidad se reunía, a veces se exponía el Santísimo Sacramento y se hacía esta medicación frente a la imagen del Cristo Crucificado. “Era un esquema básico, como otras novenas y devociones populares (…) al final se terminaba con otras oraciones que movieran a la penitencia y a la meditación para entrar en la dinámica del Tiempo de la Cuaresma”, comentó el padre Sebastián.
El Padre Víctor Manuel Arrieta desarrolló un folleto y con base en este se imprimieron algunos libritos, los cuales cuentan con un lenguaje propio de la época. A inicios del Siglo XXI, el Padre Álvaro Sáenz de la Comisión Nacional de Liturgia (Conalit) reelaboró el material con fuentes de los Padres de la Iglesia y los siete salmos penitenciales.
De acuerdo con el vicario de la Basílica, el Padre Sáenz buscaba vincular esta devoción a la celebración de la Santa Misa. También quería que los fieles hicieran la meditación en sus casas o que se organizaran para ir a un templo y exponer el Santísimo Sacramento, aunque no estuviera el sacerdote.
Este año, el Padre Sebastián hizo una renovación del texto, con el objetivo de hacerlo más accesible al público en general. También trató de contextualizar cada frase pronunciada por Nuestro Señor y analizar el estilo de cada evangelista para una mejor comprensión.
El Pbro. Víctor Manuel Arrieta
El Padre Víctor Manuel Arrieta (mejor conocido por su seudónimo Ludovico) nació en Grecia, Alajuela, el 11 de mayo de 1892. Fue un sobresaliente sacerdote que sirvió en varias parroquias de la Arquidiócesis de San José, cofundador de Radio Fides y director por muchos años del Eco Católico.
Promovió la declaración de Nuestra Señora de los Ángeles como Patrona de Costa Rica. Asimismo, difundió, organizó y popularizó el culto y la romería. Por esa razón, se le declaró capellán emérito de la Basílica de los Ángeles, según reseña una ficha de la Sistema Nacional de Bibliotecas.
Fue miembro del Cabildo Metropolitano e incluso el Vaticano le concedió el título de canónigo teologal. Se desempeñó como primer capellán del Hospital Calderón Guardia y se le considera como el primer sacerdote que rompió con la tradición en cuanto a la arquitectura de los templos, pues sustituyó el modelo clásico cuando se edificó el templo del Perpetuo Socorro (Sabana) en forma triangular.
Fue coadjutor en la Iglesia La Merced, confundador de la Red de Emisoras Católicas y creador de la Meditación de los Siete Lunes. Falleció el 16 de julio de 1983.
Las 7 frases de Jesús en la Cruz
1.Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen (Lc. 23, 34)
2. Hoy estarás conmigo en el paraíso (Lc. 23, 43)
3.
Mujer, he ahí a tu hijo… hijo, he ahí a tu madre (Cfr. Jn. 19, 26-27)4. Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? (Mt. 27, 46)
5. ¡Tengo sed! (Jn. 19, 28)
6. ¡Todo está cumplido! (Jn. 19, 30)
7. Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu (Lc. 23, 46)
El Padre Víctor Manuel Arrieta creó la Meditación de las Siete Palabras de Jesús en la Cruz.
