Monseñor Buigues explicó que 40 Días por la Vida es una campaña internacional que pretende orar y promover la sensibilidad de la sociedad a favor de la vida, en contra del aborto y de todo aquello que la amenaza. Aquí en Costa Rica inició hace unos 7 años y se había hecho en el Parque Central, en San José, pero esta vez se han buscado otros espacios con mayor incidencia, por eso hoy escogieron dejar su mensaje a los médicos del hospital San Juan de Dios.
"Este año, además, se está realizando en la Diócesis de Alajuela y en la de San Isidro, consiste en estar, en condiciones normales, 12 horas al día en un lugar público orando contra el aborto y manifestándose en contra de él", explicó Monseñor Bartolomé. Dada la pandemia, solo se están reuniendo seis horas al día, durante 40 días. Iniciaron a fines de setiembre y terminarán a inicios de noviembre. En Alajuela los activistas pro vida se manifiestan en el Hospital San Rafael.
También, agregó el obispo, sensibilizan a quienes se le acercan a conversar, incluso a nivel mundial, han logrado evitar la muerte de muchos bebés en el vientre de sus madres gracias al diálogo con ellas.
Precisamente, a las madres que piensan en el aborto como una opción, el obispo les recuerda que en la Iglesia pueden encontrar la ayuda que necesitan para no hacerlo, para acoger la vida que viene, y después cuando nazca, que se evalúe qué es lo mejor, si se compromete a criarlo o incluso si se podría dar en adopción. "Hay muchas familias que esperan adoptar un hijo y ante todo, salvar la vida, la vida hay que protegerla por encima de todo, el que viene es una vida, no un conjunto de células como dicen algunos, y entre todos debemos apoyar a que esa vida llegue en plenitud", dijo.
Recordó que la Iglesia tiene un centro de acogida como es la Posada de Belén, donde 70 madres adolescentes son ayudadas para llevar a buen término sus embarazos y los primeros años de sus hijos, ahí reciben formación y se les provee de lo que necesiten para que salgan adelante en la vida.