

“Es un Programa muy necesario, no para pensar en el galardón de la Bandera, porque ciertamente nuestra bandera está en el cielo. Para mí es un estilo de vida surgido del amor que le tengo a Dios y a su Creación”, dice Elsa Gamboa, coordinadora del comité de la Parroquia Dulce Nombre de Jesús, en Mercedes Sur de Heredia.
Los costarricenses elaboran el tradicional pasito navideño en sus casas y uno de los elementos más comunes es el musgo (o lana) para recrear el paisaje de Belén. Sin embargo, se hace un llamado a la población para que evite comprar este tipo de materiales conseguidos de forma ilegal.
El Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE), mediante el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC), informa que la lana o el musgo es un elemento importante para los ecosistemas, por lo que solamente se puede extraer lana de potrero, caracterizada por su color verde.
Cáritas Arquidiocesana invita a parroquias, grupos pastorales y fieles en general a unirse a esta campaña, la cual consiste en hacer una siembra de plantas que sirvan de alimento para las abejas (y eventualmente para otros polinizadores).
Ya están abiertas las inscripciones para que parroquias, centros educativos católicos y organizaciones religiosas en general participen del Programa Bandera Azul Ecológica, en la categoría Eclesial Ecológica.
Después de estar en el primer lugar en las dos mediciones anteriores, Costa Rica deja de ser el país que encabeza América Latina como el más avanzado en Ecología Integral Humanista, Panamá y Chile se ubican ahora por delante.
Este es uno de los datos más llamativos del Índice de Ecología Integral Humanista (IEIH), presentado esta semana por la Universidad Católica de Costa Rica (UCAT) y el INCAE Business School. La presentación se realizó el pasado 14 de diciembre.